Como ya os he dicho en alguna ocasión, mis
humanos son arqueólogos y eso provoca que visitemos lo que según ellos son
yacimientos, según yo son sitios muy grandes en los que pasamos mucho rato dónde
hace mucho sol y no me dejan hacer pipí. Pero para acortar los llamaremos
yacimientos, me parece bien.
Pues lo dicho, he visitado miles de estos
yacimientos en muchísimos sitios, creo que cada vez que salimos de casa es para
ver piedras que están en el suelo. Pero no me quejo porque así tengo mundo que
dicen y les puedo explicar mis aventuras tanto a mis amigos como a vosotros que
me leéis.
Yo en estos sitios he aprendido a hacer 3
cosas básicamente:
- me he
hecho experto en encontrar sombras, dado que las piedras tienen poca altura, a
los romanos se ve que les gustaba destruir sus casas cuando se iban, hay que
buscar al ladito de los muritos las sombritas. En esos puntos puedes esperar a
que tus humanos miren las piedras, yo no se que les deben decir, será algo
parecido a la información que a mi me dan los pipis de otros perros.
- También
me he hecho un experto en buscar unas piedras que normalmente son blancas y que
siempre están frías. Según mis humanos es mármol y oye, estos romanos lo usaban
mucho y eso me facilita la vida a mí para estar fresquito.
- Las
fotos, a estos humanos les encantan las fotos, en serio, si tenéis perros no
les hagáis sufrir, nos gusta jugar y comer, pero esto de posar en miles de
sitios y con vosotros pues nos aburre, yo a los míos se lo indico dándoles
lametones pero parece que no lo entienden, si a mi ya me parece bien que
estemos todos juntitos no hace falta más. Bueno que me pierdo, pues ya se donde
tengo que posar, si hay algo que veo que miran mucho, ahí que me van a colocar,
pues yo que soy muy listo voy y me coloco.
Mi primera visita fue por estudios de mi
humano según entendí y según vi, ya que me pareció un poco aburrido. Yo por
aquel entonces era un poco bebé y me llevaron a un sitio que hacía frío y dónde
no me dejaban jugar ¿para qué? Para ponerse a medir piedras. Veamos familia que
yo os quiero mucho pero esto no es divertido para un bebé perruno. Si me llegan
a decir que esa iba a ser la primera de muchas me habría negado, por suerte la
cosa ha ido cambiando y las visitas suelen ser para pasear, a veces demasiado
rato, pero entonces al menos nos movemos. Aunque tengo que decir que de estas
de medir ha habido muchas, pero no sólo de medir, también de hacer fotos a cada
mini detalle hasta de ponerse a dibujar. De verdad, que raros sois los humanos.
Mis humanos dicen que soy un privilegiado
porque he estado en sitios muy importantes de estos de sus piedras. Hay unos
sitios a los que íbamos mucho en Italia donde las piedras estaban mejor
colocadas, pero eso también implicaba que eran visitas muy largas, y cuando
digo muy largas es literal que me llevaban hasta mi comida.
Pero también es verdad que en muchos de
estos sitios había zonas para jugar o ellos buscaban zonas para que yo jugase,
no me voy a quejar por todo. Incluso me llevaban juguetes siendo pequeñito y me
dejaban ir jugando mientras ellos hacían sus cosas de hablar con piedras o
paredes.
Otra de las manías que tienen los humanos
en estos sitios es la de leer o escuchar cosas. Con tanto yacimiento pensar que
he visto de todo y yo esto si que no lo entiendo aunque ya me viene bien para
descansar a la sombrita o jugar o sobretodo, para que me den agua. Que de eso
tampoco me puedo quejar que me van dando agua, aunque si que me quejo de que
luego no me dejen evacuarla en cualquier sitio.
En estos sitios también hice amigos (ya os he dicho que soy muy majo) pero eran amigos un poco raros, dado que no me hacían caso. No se porqué motivo a mis humanos les hacía gracia que no me contestasen, a mi me parecían maleducados. Os enseño un par de fotos a ver si le veis la gracia.
Además de ver piedras una vez me llevaron a
un sitio muy raro, las cosas que normalmente hay en el suelo, esta vez estaban
en estanterías y el edificio estaba entero. Según me explicaron se llama Museo,
pues eso que he estado en un museo.
Bueno amigos, no dudéis en preguntarme lo
que os apetezca sobre piedras romanas, pues como veis las domino.
¡Hasta la próxima!
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